martes, 2 de octubre de 2012


Mis papás son de Venus y yo de Marte


Pixland/Thinkstock
¿A veces sientes que hablas en chino cuando tratas de comunicarte con tus papás? ¿O que por más que lo intentas no puedes llegar a ningún acuerdo con ellos? Relájate, a todos nos ha pasado y sí existe una solución, sólo debes aprender a usar su mismo idioma.
Evita broncas…
Seguro has escuchado frases como: “No llegues tarde”, “Limpia y levanta las cosas de tu habitación”, “Deja de hablar tanto por teléfono” y de inmediato el chip “Contreras” que está en tu cabeza empieza a maquilar la respuesta que más pueda molestar, como: “Luego”, “Al rato”, “Nada más tantito”. ¡Eso está fatal!
Si ya sabes lo que le moleta a tu ma’ o a tu pa’, ¿por qué te esmeras en hacer todo lo contario, hasta parece que te gusta que se enojen, todo sería mucho menos complicado si cedieras sin contestaciones a todo lo que te piden, total, ¿qué te cuesta?
No intensees…
Algo que puede molestar a cualquiera y no sólo a tus papás es que te pongas necia y que si ya te dijeron una vez que no, molestes hasta conseguir el sí, mejor aprende a negociar, por ejemplo, si hoy te prohibieron ir al cine con tus amigas, diles: “Ok, acepto el trato, ¿pero dentro de ocho días si me dejarás?”. Al notar que estás dispuesta al diálogo y a aceptar sus condiciones, también ellos podrán dar su brazo a torcer en otras situaciones.
Gánate su confianza…
Procura sacar buenas calificaciones, ayudar a tu mamá en algunas responsabilidades y quedarte callada cuando te den algún consejo, así no tendrán ninguna razón para negarte algo cuando se los pidas y tampoco abuses, si ya te compraron algo caro esta quincena, no pidas otra cosa, y si ya pediste un permiso ayer, no te claves en la idea de salir también hoy y mañana, tú también debes plantearte límites.
Date a desear…
Es obvi que deseas estar en todos los reven, salir todo el tiempo con tus amigas y pasártela pegada a tu galán pero recuerda que también es muy importante que pases tiempo con tu familia y un poco más a solas, para que la convivencia con las personas externas a tu casa sea más sana y divertida. Tus pas’ también se darán cuenta de que eres una chava centrada y que pueden confiar en ti.
Cero mentiras…
Evita mentirles a tus papás, tal vez puedes no mencionar algunas cosas muy personales pero mientras más les mientas, más puertas te cerrarás en cuanto a permisos y favores. Es mejor que ellos siempre sepan en dónde y con quién estás, ¡el que nada debe, nada teme!

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