¡Adiós a las bolsas y las ojeras!

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Las bolsas y las ojeras son dos problemas que tienen diferente origen y por tanto, se combaten de distinta manera. Vamos por partes.

* Las bolsas. Se forman debido a la retención de líquidos en esta zona; generalmente ocurre durante la noche cuando adoptamos una posición para dormir que no cambia en varias horas. Si eres propensa a que se te hinchen los ojos, lo más recomendable es que duermas con la cabeza elevada con dos almohadas. Si despertaste con bolsas coloca una bolsa de té de manzanilla fría en cada ojo y déjalo actuar durante 25 minutos. También puedes aplicarte cremas para deshinchar que contengan cafeína.

* Las ojeras.  Desafortunadamente, las ojeras son un rasgo hereditario, así que si tu mamá o tu abuela las tienen, ésa es la razón de que las veas todos los días en tu cara. Esos feos círculos de color oscuro se deben a vasitos de la piel rotos o hiperpigmentación (o sea, que tu piel se pone más negra de lo normal). Para aclararlas necesitas aplicar un producto que contenga hidroquinona o ácido kojico, de preferencia recetado por un dermatólogo. También puedes usar cremas o corrector que contengan mica o partículas que reflejen la luz. Esto ayuda a desviar la atención y a minimizar el aspecto de las ojeras.